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Fortunata y Jacinta

Desmontando la Leyenda negra: “Qué m… de país”

Forja 001 · 26 septiembre 2018 · 6:06

¡Qué m… de país!

Buenos días sus Señorías. Mi nombre es Fortunata y Jacinta y aquí da comienzo un nuevo programa de opinión “parcial, apasionada y política” en redes sociales. Porque, claro, como últimamente se ha puesto de moda eso de ir soltando juicios irrelevantes y subjetivos a diestro y siniestro me he dicho: “pues no voy a ser yo menos”.

Y ustedes se preguntarán: “¿y qué significa la ‘m’ del título?” Porque, claro, le trae a uno resonancias tan familiares… Algunos dirán con recelo: “Pero ¿qué insinúa la mona esta?” Y otros más exaltados: “¡Estoy por mandar a una pareja del Orden Público para que la trinquen!”

Pero verán, yo he observado que algunos españoles y españolas, en cuanto se despiertan por la mañana, gritan gesticulando locamente: “¡pero qué mierda de país!” Otros en cambio, españolas y españoles, en cuanto se acuestan por la noche, piensan soñadores: “¡Qué maravilla de país! Oye, qué maravilla…” Pues bien, yo ayer estuve buscando en www.buscapalabra.com y descubrí que existen 33.648 palabras en español que empiezan por ‘m’, y me dije: “ya está todo solucionado, tenemos para todos los colores”: ¿Qué usted se ha tragado enterita la Leyenda negra? Pues “qué mierda de país”. Que se ha tragado la Leyenda rosa, pues “qué maravilla de país”. En cambio, si usted es de los que prefiere la investigación y los análisis comparativos, también puede hacerlo a lo Sánchez Albornoz que escribió: ‘España, un enigma histórico’. ¡Y es que tenemos la “m” de misterio!. Pero verán, yo ayer descubrí algunas maravillosas, por ejemplo: ¡Qué magnetodinamización de país!,¡Qué microelectrólisis de país¡ ¡Qué maraca de país! ¡Qué milagro de país! o ¡Qué manada de país!

Y también tendrán curiosidad por saber en qué “m” se posicionará Fortunata y Jacinta. Verán, como somos dos, unas veces estaremos de acuerdo y otras veces no. Aunque con lo de la “mierda” siempre estaremos de acuerdo en que no nos gusta porque nosotras somos muy finas y no nos gusta eso de la mierda. A nosotras nos interesa mucho más lo del misterio y lo de la maravilla, y también lo del milagro por eso que decía Bismarck, el canciller alemán: “España es el país más fuerte del mundo: los españoles llevan siglos intentado destruirlo y no lo han conseguido”.

Porque verán, se da un caso asombroso en este solar hispano nuestro y es que, con tantos motivos como teóricamente tenemos para considerar maravillosa a nuestra madre patria, resulta que se ha instalado en una parte importante del imaginario colectivo la idea de que, en realidad, España es un país miserable, mezquino, maldito, malo y malcriado lleno de mentecatos, majaderos, mequetrefes, mostrencos y mastuerzos.

Pero a lo que íbamos, lo cierto es que estos tópicos sobre España tienen mucho de maniobras políticas, de mentiras repetidas un siglo tras otro y también de maledicencia y maquinaciones por parte de unos y mala prensa o muy mala prensa por parte de otros. Y lo que sucede es que, como muchos de nosotros tenemos un desconocimiento bastante importante sobre la Historia en general y sobre la Historia de este solar hispano nuestro en particular, resulta que nos convertimos en purita carne de cañón, en criaturas fácilmente impresionables y muy domesticables; perfectamente amaestrables, domables, maleables; en definitiva, en un peligro.

—Españoles, el tercer género de materialidad o M3 ha muerto. Por lo menos en redes sociales…

“¡Pero claro, no todos somos unos ignorantes!” –dirán algunos, por ejemplo Arturo Pérez Reverte. Y es verdad que este señor debe saber bastante más Historia que Fortunata y Jacinta pero, oye, mira cómo aprovecha el tío lo del mito del Gran Inquisidor para sus libros… Y eso que es uno de los pocos que sabe que hay mucho de mito en lo del Gran Inquisidor.

Y ya que me he metido en harina, quería comentar que menos mal que muchos de los investigadores que están estudiando el caso de la Inquisición en toda Europa –repito, en toda Europa–, son canadienses, estadounidenses, franceses y también daneses (quienes asombraron al mundo con sus descubrimientos ya en la década de los setenta). Menos mal, digo, que no eran todos españoles porque si llegan a serlo les hubiéramos tachado enseguida de fachas. Y si quieren saber algo más sobre el tema, basta con que se metan en la Wikipedia y pongan “caza de brujas” y después “distribución geográfica”, y allí les informan de algunos pormenores.

Y hasta aquí este primer capítulo de ‘Qué m… de país’. Nos vemos en el próximo y recuerda: “Si no conoces al enemigo ni a ti mismo, perderás cada batalla”. Hasta luego.

 



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