Separata de la revista El Catoblepas • ISSN 1579-3974
publicada por Nódulo Materialista • nodulo.org
El Catoblepas • número 64 • junio 2007 • página 15
«Hasta hoy, toda sociedad descansó, como hemos visto, en el antagonismo entre las clases oprimidas y las opresoras. Mas para poder oprimir a una clase es menester asegurarle, por lo menos, las condiciones indispensables de vida, pues de otro modo se extinguiría, y con ella su esclavizamiento. El siervo de la gleba se vio exaltado a miembro del municipio sin salir de la servidumbre, como el villano convertido en burgués bajo el yugo del absolutismo feudal. La situación del obrero moderno es muy distinta, pues lejos de mejorar conforme progresa la industria, decae y empeora por debajo del nivel de su propia clase. El obrero se depaupera, y el pauperismo se desarrolla en proporciones mucho mayores que la población y la riqueza. He ahí una prueba palmaria de la incapacidad de la burguesía para seguir gobernando la sociedad e imponiendo a ésta por norma las condiciones de su vida como clase. Es incapaz de gobernar, porque es incapaz de garantizar a sus esclavos la existencia ni aun dentro de su esclavitud, porque se ve forzada a dejarlos llegar hasta una situación de desamparo en que no tiene más remedio que mantenerles, cuando son ellos quienes debieran mantenerla a ella. La sociedad no puede seguir viviendo bajo el imperio de esa clase; la vida de la burguesía se ha hecho incompatible con la sociedad.» (Carlos Marx y Federico Engels, Manifiesto del Partido Comunista, 1848.)
La prensa oficial de la República Popular China, orientada directa y sabiamente por el Partido Comunista de China PCCh, aprovechó el pasado mes de marzo, cuando se cumplía el segundo centenario del acuerdo del parlamento londinense de 25 de marzo de 1807 por el que se prohibía el comercio británico de esclavos africanos, para alertar al mundo, en las principales lenguas internacionales y supranacionales, de que en 2007, según la ONU, subsisten en el mundo 27 millones de esclavos. Hace doscientos años el desarrollo industrial fue convirtiendo la esclavitud en un sistema poco eficiente, que obligaba a los propietarios a tener que mantener no sólo a unos esclavos a los que cada vez era más difícil obligar a trabajar y producir de forma rentable, sino a tener que mantener a todas sus numerosas familias llenas de niños hambrientos, viejos inútiles e inválidos quejosos. Aquella realidad nueva, aderezada por prédicas más o menos bondadosas e ingenuas de armoniosos y a la vez pragmáticos burgueses abolicionistas, fue abriendo el camino para que millones de nuevos trabajadores, ya formalmente libres y soberanos de sus cuerpos y de sus vidas, se fueran incorporando como consumidores al creciente mercado capitalista para, dotados con un reloj en su bolsillo para mejor poder medir los tiempos, tener que venderse como piezas humanas en la imparable maquinaria productiva del progreso, generador a la vez de formas mucho más sutiles, refinadas y modernas de explotación y entontecimiento del hombre por el hombre. Pero después de Marx y de Engels, y sobre todo de Lenin, de Stalin y del presidente Mao, los ideólogos de la sexta generación de la izquierda podían ya permitirse, doscientos años después, hablar con suficiencia y superioridad moral y política de aquellas fases prerrevolucionarias ya superadas...
Pero no habían transcurrido siquiera tres meses cuando esa misma prensa oficial de la República Popular China, orientada directa y sabiamente por el Partido Comunista de China PCCh, tenía que informar y reconocer la cruda realidad de la China de hoy, en la que empresas al servicio del Pueblo se sirven de parte de ese Pueblo como esclavos. ¿Cómo es posible que existan en 2007 esclavos en la República Popular China? ¿Bastará acaso con eliminar físicamente a los responsables directos de tales situaciones? No parece suficiente, pues la cadena de responsabilidades, que comienza efectivamente por los explotadores esclavistas directos, se continúa por las autoridades más cercanas, afecta a los escalafones ascendentes de la dirigencia, pero también a cada uno de los 67 millones de militantes del Partido Comunista de China... y termina sin duda en los cientos de millones de ansiosos y cómplices consumidores internacionales de los baratos productos chinos. ¿Qué diría el presidente Mao? ¡Y sólo hace diez años que falleció Deng Xiaoping, el «pequeño timonel»! ¿Cabrá todavía confundir las cosas atribuyendo lo sucedido a vestigios del perverso hacer de la banda de los cuatro? ¿Cuánto tiempo aguantará a este paso la República Popular China en su actual y solo aparente eutaxia?
26 marzo 2007
Estadística de la ONU: subsisten en el mundo 27 millones de esclavos, que llevan una vida miserable
El 25 de marzo hace 200 años el Parlamento británico anuló el sistema de compraventa de esclavos. Desde entonces se abolió la esclavitud también en otras partes del mundo. Sin embargo, según una estadística de las Naciones Unidas, el tráfico de personas sigue feroz. Subsisten en el mundo 27 millones de esclavos, que llevan una vida miserable. Ocurren todos los días casos de maltrato, trata de blancas y menores, enclaustramiento y coacción a mujeres a servir de esclavas sexuales.
Según medios de comunicación de Hong Kong, en 1672 se creó en Inglaterra una compañía monopolística del negocio de esclavos. El monopolio fue suprimido en 1698, pero Liverpool y otras ciudades continuaron tomando a Londres por centro del comercio de esclavos. Fue hasta el año 1807 cuando el sistema de comercio de esclavos se derogó oficialmente en el territorio metropolitano de Inglaterra, y se fue prohibiendo gradualmente tal comercio en los 26 años subsiguientes en las colonias británicas.
En el subcontinente africano, aproximadamente 200-800 mil personas son vendidas cada año. Muchos niños vendidos son obligados a hacer trabajo pesado, y las mujeres, a meterse a putas en Europa u Oriente Medio. Una estadística realizada por una organización internacional anti-esclavitud muestra que tan sólo en la región de Níger al menos 43.000 personas viven como esclavos. En su mayoría son víctimas de maltrato o abuso sexual, y reciben pocos alimentos de mala calidad para matar el hambre.
218 millones de niños obreros trabajan como esclavos. En países surasiáticos como India, Pakistán, Bangla Desh y Nepal, millones de niños obreros llevan una vida de esclavos. Despiadadamente explotados por los patrones, se ganan la vida con ínfimos salarios. Aunque la ley de India estipula la prohibición del empleo de niños menores de 14 años, los recientes datos publicados por su departamento laboral muestran que trabajan 12,6 millones de niños de 5-14 años. Es la región del mayor número de niños trabajadores en el mundo.
Conforme a una estadística del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), los niños obreros suman en el mundo 218 millones. Muchos de ellos trabajan en condiciones malas. Además, 300.000 niños que viven en zonas de guerra han sido alistados en el servicio militar, incluidos menores de 10 años.
Mujeres vendidas a Reino Unido. La coordinadora de la organización anti-esclavitud internacional, Skrivankova, señaló que «durante los últimos 200 y tantos años después de la cancelación de la ley de negocios de esclavos el estado de cosas no ha mejorado. Aunque ahora todo el mundo se opone a la esclavitud, el negocio de esclavos sigue expandiéndose en la realidad y mucha gente se beneficia de él». Hoy día los esclavos no se limitan a africanos. Una organización que ofrece protección a las mujeres víctimas señaló que la mayoría de ellas provienen de Lituania, Albania, Nigeria y Tailandia. Las mujeres vendidas al Reino Unido fueron al precio de aproximadamente 8.000 libras esterlinas (equivalentes a unos 120.000 yuanes) cada una.(Pueblo en línea)
15 junio 2007
Policía china rescata a 217 personas esclavizadas en fábricas de ladrillos
La policía de la provincia central china de Henan anunció ayer la detención de 120 sospechosos y la liberación de 217 personas, 29 de ellos niños, obligados a trabajar como esclavos en firmas productoras de ladrillos.
Los trabajadores fueron seducidos o enviados por traficantes a las fábricas, donde a su llegada fueron golpeados, privados de alimento y obligados a trabajar durante largo tiempo sin remuneración alguna.
Durante las últimas dos semanas los medios de comunicación han venido centrando su atención en los niños capturados para trabajar como esclavos en la vecina provincia de Shanxi.
Más de 35.000 agentes de policía fueron enviados a inspeccionar los 7.500 hornos de ladrillos en Henan durante los días 9 y 12 de este mes.
Qin Yuhai, vicegobernador y jefe de policía de Henan, señaló que «tenemos que aprovechar todo lo que tenemos en nuestras manos para combatir el tráfico de seres humanos y rescatar a los apresados», para lo que ha sido creado un grupo especial de policía.
La policía en Zhengzhou, capital de la provincia de Henan, detuvo a 13 sospechosos el viernes pasado y rescató a ocho personas.
En Xinxiang la policía realizó una redada en 20 hornos el sábado en las que recuperó a 23 personas, incluidos 16 niños.
17 junio 2007
China emite orden de búsqueda contra capataz que utilizó trabajadores esclavos
El Ministerio de Seguridad Pública de China ha publicado una orden de búsqueda contra un capataz acusado de emplear a trabajadores esclavos en la provincia septentrional china de Shanxi.
Heng Tinghan, de 42 años, natural de la provincia central de Henan, está acusado de esclavizar a los trabajadores de una fábrica de ladrillos del distrito Hongtong de la provincia septentrional china de Shanxi desde marzo de 2006, situación que provocó la muerte de un trabajador y heridas a otros 20.
Las autoridades han ofrecido una recompensa de 20.000 yuanes (2. 500 dólares USA) para quien pueda aportar información que contribuya a su detención.
Hasta la fecha, un total de 331 personas, entre ellas nueve niños, han sido liberados de las firmas donde trabajaban como esclavos en Shanxi, elevando el número total de trabajadores esclavos rescatados a 548, de los que 217 fueron rescatados en la provincia vecina de Henan, tras la puesta en marcha de una campaña de investigación en las fábricas de ladrillos y minas de hierro y carbón que suma hasta el momento 24 arrestados.
18 junio 2007
Detenidos 168 implicados en trama de esclavos de fábricas de ladrillos chinas
La policía china ha detenido a 168 personas tras las últimas operaciones llevadas a cabo para rescatar a los trabajadores esclavizados en fábricas de ladrillos y minas en las provincias centrales Shanxi y Henan.
Según fuentes policiales, 48 personas fueron detenidas en Shanxi, mientras que el resto de supuestos implicados en la trama fueron detenidos en la provincia vecina de Henan.
El número de personas liberadas en la provincia de Shanxi, principal cuenca carbonífera del país, se elevó ayer a 351, de los que 22 son menores de edad.
Heng Tinghan, de 42 años, responsable de una fábrica de ladrillos en el distrito Hongtong de Shanxi, fue arrestado ayer poco después de emitir las autoridades una orden de búsqueda, acusado de esclavizar a los trabajadores desde marzo de 2006, en situaciones inhumanas que provocaron la muerte de un trabajador y heridas a otros 20.
Mientras tanto, en la provincia vecina de Henan, principal origen de los esclavos, la policía ha capturado a 120 sospechosos.
De acuerdo con el buró de seguridad pública de Henan, 217 esclavos han sido liberados en esta provincia, 29 de ellos menores de edad y 10 con minusvalías psíquicas.
En Zhengzhou, capital de Henan, en las operaciones de rescate se ha conseguido desarticular a cinco grupos mafiosos involucrados en los secuestros, con la detención de 13 miembros.
El uso de trabajadores esclavizados salió a la luz pública tras la petición de ayuda lanzada a principios de este mes en internet por más de 400 padres procedentes de Henan, quienes denunciaban que sus hijos desaparecidos habían sido secuestrados y esclavizados en Shanxi.
19 junio 2007
La Federación Nacional de Sindicatos interviene en la investigación del empleo infantil para reforzar la protección de los derechos e intereses de los trabajadores
La explotación laboral de niños y adultos descubierta en varias fábricas de ladrillos ilegales de la provincia de Shanxi ha tenido un impacto extremadamente grave en la sociedad china. De momento, el número de trabajadores rescatados y trasladados se eleva casi a seiscientos.
En una rueda de prensa celebrada el día 18 en Pequín, la Federación Nacional de Sindicatos dio a conocer los primeros resultados de las investigaciones sobre este incidente. Zhang Mingqi, responsable de la investigación, dijo:
«Hasta la fecha, cinco personas han sido arrestadas por haber detenido ilegalmente y haber maltratado a los trabajadores de una fábrica de ladrillos clandestina. Asimismo, los bienes de la fábrica han sido congelados».
Entre los detenidos se encuentran el propietario de la fábrica, Wang Bingbing, el jefe de producción, Heng Tinghan, y tres vigilantes, Zhao Yanbing, Heng Mingyang y Liu Dongsheng. Según fuentes policiales, los cinco se han confesado culpables de las acusaciones.
Las investigaciones policiales han revelado que Heng Tinghan, de 42 años y natural de la provincia central de Henan, secuestró a treinta y un trabajadores de origen rural en estaciones de ferrocarril de dicha provincia y de las provincias vecinas de Shaanxi y Shanxi.
Heng, que en febrero del 2006 había arrendado la fábrica de Wang, prometió a los secuestrados empleos con buenos sueldos. Pero luego los utilizo como esclavos en dicha fábrica, ubicada en Hongtong, distrito de Shanxi.
A los secuestrados se les alimentaba poco y mal, se les obligaba a trabajar largas jornadas y permanecían vigilados por perros para evitar que escaparan.
En noviembre pasado uno de estos trabajadores falleció y actualmente están investigándose las causas de su muerte.
Un equipo compuesto por funcionarios de la Federación Nacional de Sindicatos, el Ministerio de Seguridad Pública y el de Trabajo y Seguridad Social se han trasladado a Shanxi para investigar el caso.
Zhang Qiming anunció que la Federación Nacional de Sindicatos seguirá de cerca este incidente e impulsará resueltamente la investigación y eliminación del empleo ilegal, con el fin de poder proteger mejor los derechos e intereses legítimos de los trabajadores provenientes del campo:
«En adelante, la Federación Nacional de Sindicatos y las organizaciones sindicales de la provincia de Shanxi, además de seguir colaborando en las investigaciones, continuaremos fomentando la conformación de los niveles básicos de los sindicatos para ampliar la cobertura de las organizaciones sindicales. Al mismo tiempo, expondremos nuestras opiniones y propuestas sobre la normalización del empleo y cooperaremos con los departamentos pertinentes en la defensa de los derechos e intereses legítimos de los trabajadores, en particular de los procedentes de las zonas rurales».
Sun Baosu, viceministro de Trabajo y Seguridad Social, manifestó que este asunto «ha tenido un impacto extremadamente grave», y advirtió que todos los implicados en el tráfico y esclavización de trabajadores serán castigados severamente.
La esclavización de trabajadores salió a la luz pública tras la petición de ayuda formulada a principios de este mes en la Internet por más de cuatrocientos padres de la provincia de Henan, quienes denunciaron que sus hijos habían sido secuestrados para trabajar como esclavos en fábricas de la provincia de Shanxi.
La mayor parte de los padres afirmaban que sus hijos habían sido secuestrados o engañados en estaciones de ferrocarril y autobús de Zhengzhou, así como en las calles de esta ciudad, para posteriormente ser vendidos en Shanxi por quinientos yuanes, unos sesenta y cinco dólares.
Los menores de edad eran forzados a trabajar entre catorce y veinte horas diarias sin cobrar, y recibían fuertes palizas si se les sorprendía intentando huir.
19 junio 2007
Arrestados cinco sospechosos en relación con esclavitud en fábrica de ladrillos
Cinco personas han sido arrestadas por aprisionar de forma ilegal y herir a los trabajadores de una fábrica de ladrillos en el norte de China, informó hoy el equipo de investigación enviado por el gobierno central a la provincia septentrional de Shanxi.
Entre los arrestados se encuentran el propietario de la fábrica de ladrillos Wang Bingbing, el jefe de producción Heng Tinghan y los tres vigilantes Zhao Yanbing, Heng Mingyang y Liu Dongsheng. Los cinco han reconocido las acusaciones, según fuentes policiales.
Las investigaciones llevadas a cabo por la policía muestran que Heng Tinghan, de 42 años y nativo de la provincia central de Henan, secuestró a 31 trabajadores de origen rural en estaciones de ferrocarril de las provincias vecinas de Henan, Shaanxi y Shanxi.
Heng, quien alquiló la fábrica a Wang en febrero de 2006, prometió a los secuestrados empleos bien pagados antes de esclavizarlos en la fábrica ubicada en el distrito Hongtong de Shanxi.
Los secuestrados fueron obligados a trabajar largas jornadas y eran pobremente alimentados. Estaban vigilados por perros para evitar que escaparan.
El pasado noviembre uno de los trabajadores esclavos murió. La causa de su muerte está siendo investigada.
Un equipo de trabajo compuesto por funcionarios de los ministerios de Seguridad Pública, Trabajo y Seguridad Social y de la Federación Nacional de Sindicatos se encuentra en Shanxi para investigar el caso. Sun Baosu, viceministro de Trabajo y Seguridad Social, indicó que este caso ha tenido un «impacto sumamente grave», y advirtió que todos los implicados en la venta y uso de trabajadores esclavos serán castigados severamente.
El uso de trabajadores esclavizados salió a la luz pública tras la petición de ayuda lanzada a principios de este mes en internet por más de 400 padres procedentes de Henan, quienes denunciaban que sus hijos desaparecidos habían sido secuestrados y esclavizados en Shanxi.
La mayor parte de los padres señalan que sus hijos fueron secuestrados o engañados en las estaciones de ferrocarril y autobús, así como en las calles de Zhengzhou, para posteriormente ser vendidos en Shanxi por 500 yuanes (65 dólares USA).
Los menores de edad eran forzados a trabajar entre 14 y 20 horas al día sin recompensa económica alguna y eran agredidos en caso de ser sorprendidos tratando de huir.
22 junio 2007
China investiga posible negligencia de gobiernos locales en escándalo de esclavos
La Fiscalía Popular Suprema de China investigará la posible negligencia de los órganos gubernamentales locales en el escándalo del uso de trabajadores esclavos, para lo cual ha enviado a dos fiscales a la provincia norteña de Shanxi, donde el caso salió a la luz.
«La experiencia muestra que la negligencia se encuentra siempre detrás de los mayores accidentes. Los fiscales deben investigar la posible negligencia cuando los casos graves son expuestos a los medios de comunicación», afirmó un funcionario del departamento que investiga la negligencia de los órganos gubernamentales.
El funcionario señaló que las investigaciones deben centrarse en si el gobierno local conocía la existencia del uso de mano de obra esclava en fábricas de ladrillos ilegales, dado que existían desde hace diez años. Además, es necesario establecer si existió connivencia entre funcionarios locales y los dueños de las fábricas, y si los responsables políticos y la policía local hicieron caso omiso de las denuncias de padres de niños trabajadores.
«Si los fiscales descubren cualquier tipo de negligencia, llevaremos a cabo una investigación hasta el final sin piedad», manifestó el funcionario.
Por su parte, el Ministerio de Seguridad Pública ha enviado también a un equipo de investigación e inspectores de disciplina a la región. En estos momentos la policía busca a 20 personas implicadas en el escándalo.
Hasta el momento, 160 sospechosos han sido detenidos en las provincias de Shanxi y Henan. Hasta el pasado domingo, 45.000 policías habían inspeccionado a más de 8.000 fábricas y pequeñas minas en ambas provincias y liberado a 591 trabajadores esclavizados, entre ellos 51 niños.
Según medios de comunicación locales, muchos padres de los niños secuestrados para trabajar indicaron que sus intentos de encontrar a sus hijos fueron obstaculizados no sólo por empleadores ilegales sino también por la policía.
Un padre que no había encontrado a su propio hijo pero esperaba rescatar a otros varios niños de su pueblo natal afirmó que la policía se negó a ayudarle. «Si encuentra a su hijo, lléveselo. De lo contrario manténgase alejado de esto», le dijo un policía.
28 junio 2007
China lanzará campaña nacional contra las prácticas laborales ilegales
China lanzará una campaña de carácter nacional contra las prácticas ilegales de trabajo durante este verano, con especial atención a las pequeñas fábricas de ladrillos, minas de carbón y talleres industriales, anunció el día 27 el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.
Las autoridades pondrá en marcha la campaña de dos meses de duración tras la salida a la luz del escándalo de la existencia de esclavos en fábricas de ladrillos en la provincia septentrional de Shanxi.